Un Incendio que Pudimos Haber Sofocado Casi Nos Hace Perder Todo el Trabajo Hecho
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Cinco años de esfuerzos en la reforestación de los terrenos que defendemos como de la USB y que denominamos “Reserva Ecológica USB” estuvieron a punto de perderse el pasado viernes 27 de febrero. Un incendio provocado cerca de las 7 de la noche desde la orilla de la autopista, a la altura del parque Vinicio Adames subió la ladera y se dirigió hacia el sector que hemos denominado “Planta de Gas”, donde más de 10 empresas e instituciones han contribuido con la USB a plantar más de 12.000 árboles. Quemó 20 hectáreas de sabana y pinar. El riesgo de que esto suceda siempre lo hemos calibrado, pero para minimizarlo siempre hemos contado con el apoyo logístico de la unidad de protección forestal de la Dirección de Planta Física (DPF), que hemos denominado “Brigada Forestal Guardabosques USB”. Este año falló un aspecto fundamental de esta logística: no teníamos el vehículo doble tracción asignado a dicha unidad. La falta de este vehículo hizo que el jefe de la brigada no pudiera atender el llamado de alerta que se le hizo la noche del 27 de febrero por parte de efectivos de Protección Civil Libertador estacionados en el parque Vinicio Adames. Por su parte PC Libertador no actuó por su cuenta por tampoco disponer de vehículo y contar con apenas 3 efectivos, uno de los cuales subió a Planta de Gas con su propia moto y reportó la ubicación de las llamas. Los bomberos forestales de Inparques acudieron al parque Vinicio Adames con efectivos y una unidad cisterna, pero desistieron de involucrarse con la extinción al comprobar que nadie más lo estaba combatiendo. Esto es lógico. Los bomberos del Distrito Capital acudieron al sitio y combatieron el incendio desde la orilla de la autopista, hasta donde el chorro de agua de la motobomba les alcanzaba, pero las llamas ya habían sobrepasado su alcance y siguieron quemando cuesta arriba. Por primera vez en 8 años no contamos con el vehículo que siempre estuvo asignado a la brigada a tiempo completo en el período de incendios. ¿ Porqué?: porque, a pesar de contar con el dinero para contratarlo (leasing) las trabas político-burocráticas de una cooperativa impidió que esto se concretara. Los detalles de esto son más engorrosos o truculentos, pero no vienen al caso.
Pero la Naturaleza nos ayudó….esa noche lloviznó y las llamas no estuvieron demasiado violentas, y cuando llegaron al cortafuego (dispositivo creado por la USB con recursos propios y con recursos de Banco Mercantil) el fuego se extinguió sólo, al no contar con más material combustible: el cortafuego había sido recién limpiado unos días atrás por la DPF.
Ciertamente tuvimos suerte, ya que la Naturaleza y nuestra previsión nos asistieron. Pero no había derecho a que esto sucediera. Todos los años ese incendio ocurre y se presenta casi en el mismo sitio. Y todos los años la brigada forestal de Guardabosques USB lo apaga. Entonces, ¿que faltó este año?: el vehículo.
El vehículo es un elemento “gatillo” esencial ya que permite que nuestro jefe de la brigada se desplace al sitio del siniestro a cualquier hora y cualquier día de la semana, apenas es notificado del incendio. El vehículo, sumado al liderazgo de nuestro jefe de brigada, es el que moviliza al personal de Protección Civil. Y cuando esta movilización funciona, entonces los bomberos de Inparques y los grupos de voluntarios forestales y los bomberos del Distrito Capital se animan a participar, ya que ven que existe una logística mínima para desplazarse (el vehículo de la USB) y un líder que coordina y dirige las acciones, y además combate el incendio (nuestro jefe de la Brigada Forestal Guardabosques USB).
Un incendio como este puede volver a ocurrir este año, e incluso uno peor. Otro flanco de la zona reforestada puede ser atacado, donde las llamas no consumieron combustible el 27 de febrero. También puede suscitarse un incendio voraz que suba por La Limonera (ahora densamente habitada a muy pocos metros del límite de la USB) y cuyas llamas salten el cortafuego y quemen la propia plantación de pinos.
El vehículo es un elemento esencial en nuestra estrategia de protección de los bosques y de las áreas de la Reserva Ecológica. Si no disponemos de él estamos expuestos con muy alta probabilidad a perder nuestro esfuerzo acumulado en años.
Además, el Ministerio del Ambiente ya no existe, y con él se extinguieron las dotaciones y apoyos a las brigadas de bomberos forestales voluntarios. Los recursos de PC Libertador han sido reducidos y ya ellos no pagan las becas-sueldo para sus propios voluntarios que fungen como bomberos forestales. Todo esto hace que nuestra situación sea en extremo vulnerable.
Por esta razón el vehículo cobra ahora mucho más importancia aún.
Es imperativo que dispongamos de ese vehículo doble tracción a tiempo completo durante toda la temporada de incendios. Sabemos que Planta Física lo entiende y está haciendo todo para lograrlo. Pero creo que hace falta algo más …
Prof. Edgard Yerena – Coordinador de la Comisión de Bosques USB.
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